Prevención contra huracanes
Los huracanes pueden alcanzar varios cientos de kilómetros de diámetro y están constituidos por vientos y nubes que forman una espiral en torno a un centro común que se denomina “ojo”. Sus vientos suelen soplar a más de 150 kilómetros por hora, pero su velocidad alrededor del ojo suele superar con frecuencia los 240 kilómetros. Los fuertes vientos que circundan el ojo pueden con facilidad arrancar árboles, levantar tejados de edificios, volcar coches y sus lluvias causan inundaciones, deslaves y crecientes sumamente destructivas.
En Grainger contamos con el equipo y suministros que te ayudarán a estar preparado para afrontar tormentas y huracanes.